Joshua Paul Armbrust, exempleado de la firma Digital River, utilizó sin permiso los servidores en la nube de su antigua compañía para minar Ethereum, causando más de 45.000 $ en costes de infraestructura.
Tres años de libertad condicional por fraude informático
22 de octubre de 2025 — Minnesota (EE. UU.) — El ingeniero Joshua Paul Armbrust, de 45 años, fue condenado a tres años de libertad condicional tras declararse culpable de fraude informático, luego de utilizar los servidores en la nube de su antiguo empleador para minar criptomonedas sin autorización.
Según el Departamento de Justicia (DOJ), Armbrust accedió de forma remota a las cuentas de Amazon Web Services (AWS) de la empresa Digital River entre diciembre de 2020 y mayo de 2021, ejecutando programas de minería de Ethereum (ETH) que generaron alrededor de 5.800 $ en ganancias personales, mientras que la compañía asumió más de 45.000 $ en gastos de computación.
El caso fue llevado ante el Tribunal de Distrito de Minnesota, donde el juez federal Jerry Blackwell dictó la sentencia este martes, según documentos revisados por Duluth News Tribune.
“Actuó por desesperación y necesidad financiera”
Durante el juicio, el abogado defensor William J. Mauzy alegó que Armbrust no actuó como un “hacker malicioso”, sino movido por la desesperación económica y el estrés emocional de cuidar a su madre enferma, que posteriormente falleció.
“Fue un acto desesperado, no un intento de sabotaje. Nunca ocultó su actividad y asumió toda la responsabilidad”, declaró Mauzy ante el tribunal.
Aun así, los fiscales destacaron que se trató de un uso intencional y prolongado de recursos corporativos, con minería diaria entre las 18:00 y las 7:00 h, transfiriendo las recompensas de Ethereum directamente a su billetera personal.
Ethereum en su etapa proof-of-work
El esquema se produjo cuando Ethereum aún utilizaba el modelo de prueba de trabajo (PoW), antes de su transición a proof-of-stake (PoS) en septiembre de 2022. Dicho sistema requería un gran poder computacional, lo que multiplicó los costes para Digital River.
Armbrust fue acusado formalmente en noviembre de 2024 por un delito de cryptojacking, es decir, el uso no autorizado de recursos ajenos para minar criptomonedas.
Según el DOJ, el cryptojacking “es una forma de ciberdelito en la que el agresor aprovecha los recursos informáticos de otra persona o entidad para generar criptomonedas como Bitcoin o Ethereum.”
Una empresa en declive
Digital River, que ya atravesaba dificultades financieras, cerró su sede en Minnesota y declaró insolvencia en Alemania a principios de 2025, tras perder acceso a su línea de crédito global. El caso Armbrust se sumó a una serie de contratiempos que aceleraron el declive de la compañía.